Los veintisiete refuerzan su compromiso hacia la movilidad sostenible tras haber aprobado este martes 28 de marzo el acuerdo que prohibirá los motores de combustión a partir de 2035, incluyendo los de diésel, gasolina e híbridos. Así lo han anunciado tras una reunión del Consejo de Transporte, Telecomunicaciones y Energía.
La medida, que había sido aprobada en el pleno del Parlamento Europeo el pasado 14 febrero, se mantuvo en el aire hasta este lunes tras las reservas de Alemania que, junto con Polonia e Italia, reclamaba una excepción a los biocombustibles. Sin embargo, tras el levantamiento del veto por parte de Berlín, la norma ha podido salir adelante con la negativa tan solo de Polonia, mientras que Italia y Bulgaria finalmente han decidido abstenerse.
El acuerdo aprobado hoy supone el fin de la comercialización de vehículos de combustión, ya sean de gasolina, diésel, híbridos, híbridos enchufadles y microhíbridos, a partir de 2035, aunque estos podrán seguir circulando hasta 2050. Asimismo, exige que para el año 2030 los turismos que salgan a mercado tendrán que emitir como mínimo un 55% menos de CO2 a la atmósfera.
Esta nueva medida, por la que todos los turismos y furgonetas que se matriculen a partir de 2035 tengan que ser obligatoriamente “cero emisiones”, se enmarca dentro del paquete climático que la Unión Europea quiere impulsar con el objetivo de reducir en al menos un 55% las emisiones contaminantes dentro del horizonte 2030.
Sin embargo, tras acceder a las presiones por parte de Alemania, sí podrán comercializarse aquellos vehículos que funcionen con los llamados combustibles sintéticos o e-fuels, aunque estos deberán contar obligatoriamente con un mecanismo electrónico o mecánico para evitar posibles fraudes que podrían producirse al seguir utilizando motores tradicionales.
Los coches eléctricos, en el centro del Pacto Verde Europeo
El acuerdo alcanzado por los 27 refuerza de nuevo su compromiso con la movilidad sostenible como uno de los puntos clave dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y el compromiso internacional hacia la transición ecológica. Pese a que existen otras opciones sobre la mesa, como los vehículos de hidrógeno o los de pila de combustible, la tendencia mayoritaria se inclina hacia los vehículos eléctricos.
La movilidad sostenible es uno de los grandes desafíos a nivel global y representa uno de los principales retos a superar para poder cumplir con la agenda 2030. Concretamente, la movilidad eléctrica en el entorno de las ciudades es uno de los puntos clave para alcanzar la descarbonización total del transporte en 2050.
Por todo ello, la Unión Europea no solo establece la obligatoriedad de que todos los vehículos que se matriculen a partir de 2035 sean neutras en carbono, sino que también marca la necesidad de que existan puntos de recarga eléctrica cada 60 km para poder cubrir la demanda, que se prevé que para ese año ocuparán ya el 85% de la cuota de mercado en todo el mundo.
Solo en España, el objetivo para 2030 es que existan, como mínimo, 5 millones de vehículos eléctricos en circulación para poder cumplir con las exigencias de la Ley Climática Europea. Por ello, en electrico.es trabajamos día a día en la creación de una red de carga pública propia y de última generación que contribuya a la consecución de un parque móvil sin emisiones antes de 2035.